¿Puede Bitcoin convertirse en el pionero de un cambio en el paradigma financiero?
Recientemente, una propuesta controvertida ha suscitado un amplio debate: utilizar los ingresos de las reservas de oro para comprar Bitcoin, con el fin de aumentar las reservas nacionales de Bitcoin de manera "neutra en el presupuesto". Esta propuesta proviene de altos funcionarios del gobierno de Estados Unidos, coincidiendo con la inclusión oficial de Bitcoin en el sistema de estadísticas económicas globales por parte del Fondo Monetario Internacional (FMI). A medida que Bitcoin se incorpora al Manual de Balanza de Pagos y Posición de Inversión Internacional (BPM7), los bancos centrales y las instituciones estadísticas de los países deben registrar las transacciones y posiciones de Bitcoin en los informes correspondientes. Esto no solo es un reconocimiento formal de la influencia de Bitcoin en el sistema financiero internacional, sino que también implica que está evolucionando de un activo especulativo a una herramienta financiera más institucionalizada.
Sin embargo, lo más intrigante de esta propuesta es que Estados Unidos está considerando canjear oro, que ha sido visto durante mucho tiempo como la "última reserva de valor", por Bitcoin. Esto plantea una pregunta fundamental: ¿sigue siendo el oro un activo refugio indiscutible? Si es así, ¿por qué históricamente ninguna empresa ha acumulado oro de manera tan agresiva a largo plazo como algunas lo han hecho en el mercado de Bitcoin? A medida que los responsables de políticas en todo el mundo reevalúan la posición de este activo emergente en el sistema financiero, la actitud de Estados Unidos podría marcar la pauta. ¿Podría Bitcoin convertirse en el pionero de un cambio de paradigma financiero?
La verdad sobre las reservas de oro de Estados Unidos
Estados Unidos tiene la mayor reserva oficial de oro del mundo, con 8133.5 toneladas, que se ha mantenido durante 70 años. Sin embargo, este oro no ha estado en circulación en el mercado a largo plazo, sino que se almacena en lugares específicos. Desde el fin del sistema de Bretton Woods en 1971, las reservas de oro de Estados Unidos ya no se utilizan para respaldar el dólar, sino que se consideran activos de reserva estratégica.
Por lo tanto, si Estados Unidos quiere utilizar el "excedente de reservas de oro" para comprar Bitcoin, es muy probable que lo haga a través de instrumentos financieros relacionados con el oro, en lugar de vender oro físico. Históricamente, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos ha creado liquidez en dólares ajustando el valor contable del oro, sin aumentar las reservas reales de oro. Esta operación de "reevaluación" de activos es, en esencia, una forma alternativa de monetización de la deuda.
Actualmente, el Departamento del Tesoro de EE. UU. fija el valor contable del oro en 42.22 dólares/onza, muy por debajo del precio de mercado actual. Si el Congreso aprueba un aumento en el precio contable del oro, el valor contable de las reservas de oro del Tesoro aumentará significativamente. Con base en el nuevo precio, el Tesoro puede solicitar más certificados de oro a la Reserva Federal a cambio de nuevos dólares correspondientes.
Esto significa que Estados Unidos puede implementar una "devaluación invisible del dólar" ajustando el valor en libros del oro, al tiempo que genera ingresos fiscales a gran escala. Estos nuevos fondos en dólares pueden utilizarse para comprar Bitcoin, aumentando las reservas de Bitcoin de Estados Unidos. La revalorización del oro no solo proporciona apoyo financiero para la compra de Bitcoin, sino que también puede impulsar la demanda de Bitcoin en un contexto financiero más amplio.
Sin embargo, aunque esta forma puede aparentemente impulsar a otras instituciones e inversores a seguir, atrayendo más liquidez al mercado de Bitcoin, también puede conllevar riesgos. Si el mercado determina que la pérdida de credibilidad del dólar es una tendencia a largo plazo, el sistema de precios de los activos globales podría cambiar, y el mecanismo de descubrimiento de precios de Bitcoin podría volverse más incierto.
La no libertad del mercado del oro
Si el Departamento del Tesoro de EE. UU. reevalúa el oro y utiliza el "valor contable" sobrante para intercambiarlo por dólares para comprar Bitcoin, el mercado de Bitcoin podría experimentar un fervor a corto plazo, pero al mismo tiempo enfrenta el riesgo de un endurecimiento de la regulación y el control de la liquidez, similar a la situación en la que el oro entró en la era de "precio libre" debido al colapso del sistema de Bretton Woods.
Sin embargo, el mercado del oro nunca ha sido realmente libre. Históricamente, el oro ha desempeñado un papel de "apalancamiento sombra" en el sistema monetario, además de ser un activo refugio. Hay innumerables ejemplos de la utilización del oro en juegos de poder geopolíticos, como el "escándalo del oro" de la década de 1970, la intervención indirecta en los precios del mercado a través de operaciones de "swap de oro" por parte del gobierno de Reagan en la década de 1980, y la liberación de liquidez por parte de la Reserva Federal a través del mercado de alquiler de oro en la década de 2000 para mantener la posición fuerte del dólar.
Además, el crédito del oro tampoco es inquebrantable. Los datos de reservas de 8133.5 toneladas de oro no han sido auditados de forma independiente durante años, y el estado del oro en ciertos depósitos ha sido un tema candente de discusión en el mercado, considerado como un "problema de caja negra". Más importante aún, aunque el gobierno de los Estados Unidos no venda oro directamente, podría manipular su valor a través de instrumentos financieros derivados, realizando operaciones de política monetaria en la sombra.
Bitcoin: ¿Una nueva herramienta de la política monetaria en la sombra de Estados Unidos?
Con el aumento del interés de Estados Unidos en la posesión de Bitcoin, el mercado podría entrar en la etapa de "Bitcoin como activo en la sombra"; el gobierno reconoce el valor de Bitcoin, pero limita su impacto directo en el sistema existente a través de políticas y herramientas financieras.
Supongamos que el gobierno de Estados Unidos clasifica el Bitcoin como un activo estratégico y comienza a acumularlo. Aunque el gobierno no puede controlar directamente la oferta o el precio del Bitcoin, puede realizar operaciones en el mercado a través de entidades paralelas (como el ETF de Bitcoin o fondos fiduciarios), influyendo indirectamente en el precio del Bitcoin y en el sentimiento del mercado.
Estas instituciones en la sombra pueden aprovechar la liquidez y volatilidad del mercado de Bitcoin para acumular grandes cantidades de Bitcoin en estado de "acaparamiento" y liberarlas en momentos específicos, afectando así la oferta y la demanda del mercado y la tendencia de precios. Esta operación es similar a los "swaps de oro" y "alquiler de oro" en el mercado del oro, y no implica transacciones reales de Bitcoin, sino que se logra a través de instrumentos financieros y estrategias de mercado.
Sin embargo, el Bitcoin puede no repetir completamente el destino del oro, principalmente basado en los siguientes dos puntos:
Transparencia: Las transacciones de Bitcoin son trazables en la cadena, todas las transacciones son públicas y auditables. Cualquiera puede rastrear la circulación de Bitcoin a través de herramientas de datos en la cadena. La red de Bitcoin está compuesta por nodos independientes descentralizados, cada nodo posee un libro de contabilidad completo de las transacciones y valida conjuntamente las transacciones, ninguna institución o país puede alterar o manipular los datos de transacción de Bitcoin.
Capacidad de resistencia al riesgo: El modelo de gestión centralizada del sistema financiero tradicional ha traído riesgos sistémicos, mientras que la característica de descentralización de Bitcoin ofrece una nueva solución. Incluso los Bitcoin almacenados en intercambios centralizados tienen métodos técnicos para demostrar la situación real de almacenamiento, como PoR (Prueba de Reservas) en exceso. Esto asegura que, incluso en situaciones de volatilidad extrema del mercado o pérdida inesperada de activos parciales, la institución aún tenga reservas suficientes para satisfacer todas las demandas de retiro de los usuarios.
Estados Unidos revalorizó el oro y creó un "nuevo" dólar de esta manera, y luego utilizó estos fondos para comprar Bitcoin, una estrategia que no solo es una operación de moneda sombra, sino que también expone la vulnerabilidad del sistema financiero global. Si Bitcoin puede realmente convertirse en el "oro digital" independiente y libre en este proceso, y no solo en un accesorio del sistema financiero estadounidense, aún está por verse. Sin embargo, desde una perspectiva técnica, tanto las transacciones en tiempo real verificables en la cadena como el PoR de las instituciones centralizadas ofrecen soluciones completamente nuevas para el sistema financiero tradicional. La propuesta de cambiar oro por Bitcoin ha iniciado un profundo diálogo sobre el futuro del sistema financiero.
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AirdropHarvester
· 07-28 05:35
btc alcista llegó
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FloorPriceNightmare
· 07-28 05:04
BTC ¿por qué debería reemplazar al oro? Simplemente es una tontería.
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MetaverseLandlord
· 07-25 07:17
Se acabó San Francisco, ¡se va a cambiar el tiempo!
¿Estados Unidos podría cambiar oro por Bitcoin BTC y convertirse en el pionero de la transformación del paradigma financiero?
¿Puede Bitcoin convertirse en el pionero de un cambio en el paradigma financiero?
Recientemente, una propuesta controvertida ha suscitado un amplio debate: utilizar los ingresos de las reservas de oro para comprar Bitcoin, con el fin de aumentar las reservas nacionales de Bitcoin de manera "neutra en el presupuesto". Esta propuesta proviene de altos funcionarios del gobierno de Estados Unidos, coincidiendo con la inclusión oficial de Bitcoin en el sistema de estadísticas económicas globales por parte del Fondo Monetario Internacional (FMI). A medida que Bitcoin se incorpora al Manual de Balanza de Pagos y Posición de Inversión Internacional (BPM7), los bancos centrales y las instituciones estadísticas de los países deben registrar las transacciones y posiciones de Bitcoin en los informes correspondientes. Esto no solo es un reconocimiento formal de la influencia de Bitcoin en el sistema financiero internacional, sino que también implica que está evolucionando de un activo especulativo a una herramienta financiera más institucionalizada.
Sin embargo, lo más intrigante de esta propuesta es que Estados Unidos está considerando canjear oro, que ha sido visto durante mucho tiempo como la "última reserva de valor", por Bitcoin. Esto plantea una pregunta fundamental: ¿sigue siendo el oro un activo refugio indiscutible? Si es así, ¿por qué históricamente ninguna empresa ha acumulado oro de manera tan agresiva a largo plazo como algunas lo han hecho en el mercado de Bitcoin? A medida que los responsables de políticas en todo el mundo reevalúan la posición de este activo emergente en el sistema financiero, la actitud de Estados Unidos podría marcar la pauta. ¿Podría Bitcoin convertirse en el pionero de un cambio de paradigma financiero?
La verdad sobre las reservas de oro de Estados Unidos
Estados Unidos tiene la mayor reserva oficial de oro del mundo, con 8133.5 toneladas, que se ha mantenido durante 70 años. Sin embargo, este oro no ha estado en circulación en el mercado a largo plazo, sino que se almacena en lugares específicos. Desde el fin del sistema de Bretton Woods en 1971, las reservas de oro de Estados Unidos ya no se utilizan para respaldar el dólar, sino que se consideran activos de reserva estratégica.
Por lo tanto, si Estados Unidos quiere utilizar el "excedente de reservas de oro" para comprar Bitcoin, es muy probable que lo haga a través de instrumentos financieros relacionados con el oro, en lugar de vender oro físico. Históricamente, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos ha creado liquidez en dólares ajustando el valor contable del oro, sin aumentar las reservas reales de oro. Esta operación de "reevaluación" de activos es, en esencia, una forma alternativa de monetización de la deuda.
Actualmente, el Departamento del Tesoro de EE. UU. fija el valor contable del oro en 42.22 dólares/onza, muy por debajo del precio de mercado actual. Si el Congreso aprueba un aumento en el precio contable del oro, el valor contable de las reservas de oro del Tesoro aumentará significativamente. Con base en el nuevo precio, el Tesoro puede solicitar más certificados de oro a la Reserva Federal a cambio de nuevos dólares correspondientes.
Esto significa que Estados Unidos puede implementar una "devaluación invisible del dólar" ajustando el valor en libros del oro, al tiempo que genera ingresos fiscales a gran escala. Estos nuevos fondos en dólares pueden utilizarse para comprar Bitcoin, aumentando las reservas de Bitcoin de Estados Unidos. La revalorización del oro no solo proporciona apoyo financiero para la compra de Bitcoin, sino que también puede impulsar la demanda de Bitcoin en un contexto financiero más amplio.
Sin embargo, aunque esta forma puede aparentemente impulsar a otras instituciones e inversores a seguir, atrayendo más liquidez al mercado de Bitcoin, también puede conllevar riesgos. Si el mercado determina que la pérdida de credibilidad del dólar es una tendencia a largo plazo, el sistema de precios de los activos globales podría cambiar, y el mecanismo de descubrimiento de precios de Bitcoin podría volverse más incierto.
La no libertad del mercado del oro
Si el Departamento del Tesoro de EE. UU. reevalúa el oro y utiliza el "valor contable" sobrante para intercambiarlo por dólares para comprar Bitcoin, el mercado de Bitcoin podría experimentar un fervor a corto plazo, pero al mismo tiempo enfrenta el riesgo de un endurecimiento de la regulación y el control de la liquidez, similar a la situación en la que el oro entró en la era de "precio libre" debido al colapso del sistema de Bretton Woods.
Sin embargo, el mercado del oro nunca ha sido realmente libre. Históricamente, el oro ha desempeñado un papel de "apalancamiento sombra" en el sistema monetario, además de ser un activo refugio. Hay innumerables ejemplos de la utilización del oro en juegos de poder geopolíticos, como el "escándalo del oro" de la década de 1970, la intervención indirecta en los precios del mercado a través de operaciones de "swap de oro" por parte del gobierno de Reagan en la década de 1980, y la liberación de liquidez por parte de la Reserva Federal a través del mercado de alquiler de oro en la década de 2000 para mantener la posición fuerte del dólar.
Además, el crédito del oro tampoco es inquebrantable. Los datos de reservas de 8133.5 toneladas de oro no han sido auditados de forma independiente durante años, y el estado del oro en ciertos depósitos ha sido un tema candente de discusión en el mercado, considerado como un "problema de caja negra". Más importante aún, aunque el gobierno de los Estados Unidos no venda oro directamente, podría manipular su valor a través de instrumentos financieros derivados, realizando operaciones de política monetaria en la sombra.
Bitcoin: ¿Una nueva herramienta de la política monetaria en la sombra de Estados Unidos?
Con el aumento del interés de Estados Unidos en la posesión de Bitcoin, el mercado podría entrar en la etapa de "Bitcoin como activo en la sombra"; el gobierno reconoce el valor de Bitcoin, pero limita su impacto directo en el sistema existente a través de políticas y herramientas financieras.
Supongamos que el gobierno de Estados Unidos clasifica el Bitcoin como un activo estratégico y comienza a acumularlo. Aunque el gobierno no puede controlar directamente la oferta o el precio del Bitcoin, puede realizar operaciones en el mercado a través de entidades paralelas (como el ETF de Bitcoin o fondos fiduciarios), influyendo indirectamente en el precio del Bitcoin y en el sentimiento del mercado.
Estas instituciones en la sombra pueden aprovechar la liquidez y volatilidad del mercado de Bitcoin para acumular grandes cantidades de Bitcoin en estado de "acaparamiento" y liberarlas en momentos específicos, afectando así la oferta y la demanda del mercado y la tendencia de precios. Esta operación es similar a los "swaps de oro" y "alquiler de oro" en el mercado del oro, y no implica transacciones reales de Bitcoin, sino que se logra a través de instrumentos financieros y estrategias de mercado.
Sin embargo, el Bitcoin puede no repetir completamente el destino del oro, principalmente basado en los siguientes dos puntos:
Estados Unidos revalorizó el oro y creó un "nuevo" dólar de esta manera, y luego utilizó estos fondos para comprar Bitcoin, una estrategia que no solo es una operación de moneda sombra, sino que también expone la vulnerabilidad del sistema financiero global. Si Bitcoin puede realmente convertirse en el "oro digital" independiente y libre en este proceso, y no solo en un accesorio del sistema financiero estadounidense, aún está por verse. Sin embargo, desde una perspectiva técnica, tanto las transacciones en tiempo real verificables en la cadena como el PoR de las instituciones centralizadas ofrecen soluciones completamente nuevas para el sistema financiero tradicional. La propuesta de cambiar oro por Bitcoin ha iniciado un profundo diálogo sobre el futuro del sistema financiero.